Movimiento artístico de pintores y escultores colombianos integrado por Luis Alberto Acuña, Rómulo Rozo, Ramón Barba, Hena Rodríguez, Josefina Albarracín, Carlos Correa, José Domingo Rodríguez, Ignacio Gómez Jaramillo, Pedro Nel Gómez, Alipio Jaramillo y, según algunos críticos, Débora Arango. Se caracterizó por la búsqueda de una interpretación de lo propio y lo autóctono y por una reivindicación nacionalista de la raza mestiza. Con una marcada influencia del muralismo mexicano, tuvo su época de auge durante las décadas del treinta y del cuarenta. Para Eduardo Serrano, crítico de arte, “el movimiento Bachué no surgió de manifiestos ni se configuró en grupo restringido o con pautas estrictamente demarcadas, expresándose cada quien por caminos y con objetivos diferentes. En las obras de todos ellos, sin embargo, es posible percibir –al menos en ciertos periodos– la propuesta americanista y el ímpetu nacionalista característicos del movimiento”. Su nombre proviene de la escultura Diosa Bachué, de Rómulo Rozo (1926). Posteriormente se extendió al ámbito de la literatura (con José Antonio Lizarazo, Jorge Zalamea, Darío Samper, Rafael Azula Barrera, Darío Achury Valenzuela y César Uribe Piedrahita, entre otros) y al de la música (con José Rozo Contreras y Guillermo Uribe Holguín).